Renée Zellweger es una especialista en seguir dietas, y a la vista está que en un abrir y cerrar de ojos coge unos cuantos kilos para interpretar a Bridget Jones y al poco tiempo, recupera la figura para encarnarte en una cabaretera en Chicago. Aunque en alguna ocasión ella ha hablado de los problemas del efecto yo-yo.
Según he leído, la última de las dietas a la que se ha sometido Renée, es la de la mini ración. Consiste en racionar las porciones para evitar excesos. ¿Cómo? Utilizando objetos cotidianos como instrumentos de medida, imitando a Angelina Jolie. Chocolate, dos dedales; féculas, el equivalente a una jabonera; legumbres, el plato de una taza; carne, un naipe.
La verdad es que resulta una locura, pero funcionar debe funcionar, porque Renée está extremadamente delgada… ¿estará haciendo bien los cálculos?
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