¿Cansada de probar dietas y más dieta en balde? De que las horas se hagan eternas con un vacío en el estómago que te hace estar de mala leche? Pues bien, aquí te facilito otra forma de adelgazar sin pasar hambre. Se trata de la ANTIDIETA, una forma de mantener los kilos a raya basada en el postulado de la existencia de tres ciclos metabólicos a lo largo del día, que determinan la manera correcta de alimentarse para asimilar los alimentos en forma adecuada y sin engordar...
Según he leído en el portal En Plenitud, así funcionan los tres ciclos:
Ciclo de eliminación: El organismo se encarga de en deshacerse de los subproductos del metabolismo. Durante esta fase no hay que ayunar, al contrario, el organismo necesita de una energía fácil y rápida, y para esto están las frutas. Todo lo que se ingiere durante la mañana serán únicamente zumos o frutas enteras, siempre frescas y naturales.
Ciclo de apropiación: durante esta fase, el organismo debe ingerir alimentos de mayor densidad calórica, empezando con una ingesta más simple y dejar los alimentos de digestión más complicada para las últimas horas del ciclo. Ejemplo: un almuerzo a base de ensaladas, verduras al vapor, sándwich de pan integral tostado, ingerir los lácteos más tarde y para la cena, cereales y verduras o pollo y pescado y verdura, o pastas con verdura.
Ciclo de asimilación: El organismo está ocupado en terminar de digerir. Es importante para que este ciclo se realice bien, cenar temprano y dejar transcurrir 3 horas entre el fin de la cena y el sueño.
Fuente: En Plenitud
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